Arno Victor Dorian | |
---|---|
Información biográfica | |
Nombre completo |
Arno Victor Dorian
|
Nace |
1768
Versalles, Francia |
Información política | |
Afiliaciones |
Orden de los Asesinos
|
Información out-universe | |
Aparece en |
|
Actor/actriz de voz |
Dan Jeanotte Ricardo Mendez (Español latino)
|
- Arno Victor Dorian - Assassin´s Creed Unity
Arno Victor Dorian (1768 - ¿?) fue un Asesino franco-austríaco activo durante la Revolución Francesa.
Es un huerfano que se culpa a si mismo por la muerte de su padrastro y busca venganza uniendose a los Asesinos Franceses.
En 2014, sus memorias geneticas fueron usadas por Abstergo para su Proyecto Helix, al igual que fueron investigadas por los asesinos.
Hijo del Asesino francés Charles Dorian y una mujer austriaca, Marie, Arno Victor Dorian nació en el pueblo de Versalles en 1768. Dorian pasó la mayor parte de su niñez viajando con su padre por Europa y el norte de África, hasta que en algún punto sus padres se separaron. Sin que el niño lo supiese, Marie había abandonado a Charles por su pertenencia a los Asesinos, de la que Arno tampoco sabía nada.
El joven francés acompañó a su padre al Palacio de Versalles el 27 de diciembre de 1776, pues este tenía que atender una reunión con el rey, aunque su verdadero objetivo era recibir la Caja de los Precursores, un artefacto de la Primera Civilización. Durante la ausencia de su padre, Arno conoció a Élise de la Serre, con la que conectó enseguida mientras jugaban. Al poco rato, una multitud de guardias se dirigía hacia donde Charles había dejado a Arno, el niño fue con Elise hacia allí y encontró a su padre muerto, asesinado por el templario Shay Patrick Cormac.
Completamente huerfano tras la muerte de su padre y la marcha de su madre, fue François De La Serre, por aquel entonces Gran Maestro templario, el que acogió a Arno y le trató como a un hijo. Sin embargo, François nunca habló a Arno sobre los templarios ni sobre su posición en esa facción.
Trece años despues de lo ocurrido, Arno se encontraba en un problema, pues había perdido en un juego de cartas el único objeto que le quedaba de su padre, un viejo reloj que le había entregado antes de que este muriese. Arno lo había perdido a manos de dos hermanos herreros, Victor y Hugo por lo que decidió colarse en su taller a robárselo.
Pero cuando Arno ya tenía el reloj, Victor y Hugo aparecieron en escena persiguiendo a Arno hasta la casa de François de la Serre. François consigue de alguna manera que Victor y Hugo no lo denuncien a los guardias. François entonces le ordena limpiar los caballos, pues tenía que ir a recoger en su carro a su hija Élise.
Nada mas irse François, un mensajero llega fatigado con una carta para François. Arno se ofrece a llevarle dicha carta. Tras seguirle, Arno llega a la reunión de Los Estados Generales de 1789 donde intenta localizarle, pero los herreros Victor y Hugo le impiden entregársela. Tras darle una paliza a ambos, la guardia llega y Arno se ve obligado a huir. Arno entonces, decide ir a la casa de François y dejarle la carta por debajo de la puerta de su despacho, de manera que cuando entre la vea.
Arno se consigue infiltrar en una fiesta celebrada en honor a Élise, a pesar de no tener invitación. Arno consigue llegar a la habitación de Élise donde pasan un momento romántico juntos. Muy poco después, los guardias comienzan a llamar a la puerta, por lo que Arno se ve obligado a huir de la habitación. Al llegar al patio, encuentra a François De La Serre siendo asesinado por dos hombres desconocidos. Arno se acerca al cuerpo, pero entonces uno de los asesinos llama a los guardias. Los guardias capturan a Arno y lo culpan del asesinato de François. Arno es encarcelado en La Bastilla.
Tras pasar su primera noche, a la mañana siguiente descubre que uno de los prisioneros le ha robado el reloj que le había entregado su padre. Entonces, ambos cogen un palo de madera y comienzan un combate. En mitad del combate, Arno le dice que le de su reloj y que se vuelva con sus dibujos en su pared (dichos dibujos solo Arno podía verlos debido a su Sentido de Águila. El prisionero, extrañado pregunta que a que dibujos se refería. Al mirar a la pared, Arno no ve nada, pero el prisionero entonces se da cuenta de que Arno poseía el Sentido del Águila.
El prisionero se presenta como Pierre Bellec, un asesino que trabajó con su padre, Charles Dorian y que llevaba varios años vagando de prisión en prisión buscando esos dibujos. Bellec dedica los dos meses siguientes de prisión a entrenar a Arno para convertirse en un autentico asesino.
Un día, se produce una revuelta afuera de La Bastilla. Arno y Bellec aprovechan la oportunidad para escapar. Ambos se ven obligados a saltar desde una de las torres de La Bastilla para escapar, pero Bellec le entrega antes un medallon que asegura que le guiará a la guarida de los asesinos en París.
Tras huir, Arno se dirige a buscar a Élise. Arno intenta convencer a Élise de que el no era el culpable del asesinato de su padre y además le intenta advertir de lo que era en realidad su padre, pero Élise no solo conocía ya el verdadero trabajo de su padre, sino que ella tambien era una templaria. Élise entonces encuentra la carta que Arno tenía que entregar a su padre en la que alguien llamado "L" avisa a François de un complot contra el dentro de los templarios. Élise entonces le pide a Arno que se marche, lo cual acepta y se va.
«Arno Dorian ha muerto. Ha sido borrado de este mundo, y sus fallos y pecados. Ahora ha renacido como novicio de la Hermandad de los Asesinos»―Mirabeau
Gracias al medallón, Arno consiguió encontrar la guarida de los asesinos debajo de la Sainte-Chapelle. Arno es entonces aceptado en la Orden de los Asesinos.
Pasó un año en el que Arno se entrenó para convertirse en un verdadero asesino hasta que llega su ultima prueba: debía matar a un oficial templario con el fin de conseguir unos documentos. Sin embargo, a Arno le molesta esto ya que a pesar de que Bellec y el podrían haber matado a Charles Gabriel Sivert, uno de los templarios que mató a François De La Serre, Bellec prefirió dejarlo con vida y encargarse del oficial.
Bellec y Arno llegan a la guarida. El Mentor Honoré Gabriel Riqueti estaba siendo criticado por otras asesinos por empeñarse en mantener una tregua con los templarios alegando que el nuevo Gran Maestro no iba a cumplir la tregua a diferencia de François De La Serre. Bellec entonces, dice que Arno ya ha completado un entrenamiento por lo que el Consejo de Asesinos le encomiendan la mision de matar a Sivert.
Sivert se encontraba en la Catedral de Notre-Dame, pero la entrada estaba custodiada por lo que era imponsible entrar. Arno mató en primer lugar al jefe de seguridad, un templario llamado Duchesneau. Tambien consiguió las llaves de la Catedral. Arno se hizo pasar por Duchesneau y Sivert le reveló todo lo que el sabía, tras lo cual Arno mató a Sivert con su Hoja oculta. En las memorias de Sivert, Arno descubrió al hombre que asestó el golpe mortal a François De La Serre, un hombre que se hacía llamar Le Roi des Thunes. Tras este asesinato, el Consejo de Asesinos le entregó la Hoja fantasma para acabar con su siguiente objetivo, Le Roi des Thunes.
Búsqueda de los asesinos de De La Serre
El 19 de Enero de 1791, Arno llego a La Corte de los Milagros y encontró a uno de los generales de Le Roi des Thunes, Aloys La Touche, que se encontraba cortandole el pie a un hombre con el fin de así dar mas lastima y ganar mas dinero para Le Roi. Antes de que Arno se lanzase a defender al hombre, el Marqués de Sade le sugiere que siguiese a La Touche hasta su maestro. Arno sigue a La Touche y le interroga, descubriendo que Le Roi se oculta en las cloacas. La Touche escapa y consigue advertir a Le Roi de que Arno se acerca, por lo que le tienden una emboscada, pero de nada sirve ya que al final Arno acaba matándole.
En los recuerdos de Le Roi, observa como este presta su ayuda a François De La Serre, pero este la rechaza alegando que para que quiere un ejercito de mendigos. Arno también ve que esto no fue plan de Le Roi y de Sivert, sino que la orden de matar a De La Serre venía del actual Gran Maestro.
Arno vuelve a la superficie y descubre que el Marqués de Sade ya se había nombrado como nuevo Roi des Thunes. el Marqués, entonces, le hace entrega del alfiler envenenado con el que el antiguo Roi des Thunes mató a De La Serre. el Marqués tambien le dice que fue fabricado por un platero llamado François-Thomas Germain.
El taller de Germain estaba rodeado de guardias, pero Arno consigue sacar a Germain de allí y le confiesa que ese alfiler se lo encargo un hombre llamado Chrétien Lafrenière. Arno localiza y mata a Lafrenière en una reunión de templarios, pero descubre que el no fue el que encargo la muerte de De La Serre, sino que fue además el que envío la carta a De La Serre para que tuviese cuidado. Lafrenière estaba reunido con templarios de toda Europa para que le ayudasen a frenar los planes del actual Gran Maestro. Arno tambien descubrió que Lafrenière tenía planeado atacar un hotel, lo cual le sorprendió al Consejo de Asesinos que enviaron a Arno a investigar.
«El Credo de la Hermandad de los Asesinos nos enseña que no hay nada prohibido. Antes creía que éramos libres para hacer lo que quisiéramos. Para seguir nuestros ideales a toda costa. Ahora lo entiendo. No sirve para dar permiso. El Credo es una advertencia. Los ideales dan fácilmente paso a dogmas. Dogmas que se convierten en fanatismo. Ningún poder supremo puede juzgarnos. Ningún ser superior nos vigila para castigarnos por nuestros pecados. Al final, solo nosotros podemos defendernos contra nuestras obsesiones. Nosotros decidimos si el peaje de nuestro camino es demasiado caro. Nos creemos salvadores, vengadores o redentores. Llevamos la guerra a quienes se oponen a nosotros, y ellos nos la devuelven. Soñamos con dejar nuestra marca en el mundo... Incluso dando nuestras vidas en conflictos sobre los que nadie escribirá en libros de historia. Lo que hacemos y lo que somos, empieza y termina en nosotros mismos.»―Monologo final de Arno.
Después de esto, Arno volvió a vivir a Versalles. De vez en cuando asistía a visitar la tumba de Élise, y consideró que el ya había deshecho todos sus errores. Poco después de lo ocurrido en el Temple, Arno encuentra la última carta que Élise escribio llamada El Precio
En el año 1808, Arno Dorian volvió al Temple junto a Napoleón Bonaparte a por el cuerpo de Germain, del cual solo quedaban los huesos. Arno guardo el esqueleto en una parte de las catacumbas de París, de manera que en un futuro nadie pudiese usar a Germain para encontrar a otros sabios.
A modo de recompensa, Arno se quedo con la Espada de Edén, que a pesar de haber perdido todos sus poderes resultaba ser una gran espada. En algún punto entre 1794 y 1808, Arno volvio a ser aceptado en la Orden de los Asesinos y elevado al grado de Maestro Asesino .
Arno Dorian era un hombre práctico e ingenioso, a la vez que temerario y despiadado, poseía carisma y un agudo sentido del humor; se creyó culpable de la muerte de su padre adoptivo, algo que le afligió una gran pena, y que le supuso suficiente motivo para unirse a los Asesinos y buscar venganza. Aunque perteneciese a la Orden de los Asesinos, no encontraba problema alguno en aliarse con Elise de la Serre, una Templaria, e incluso lo veía como una oportunidad para vengar su pérdida. Fue educado para ser un hombre culto, y a consecuencia de esto, citaba a obras de literatura a menudo.
Arno era capaz de hacer carrera libre, así como de llevar a cabo saltos de fe. Tenía una gran habilidad en el manejo de la espada y en el sigilo. Portaba un sable francés, una hoja oculta —modificada como la hoja fantasma—y una pistola. En sus misiones iba ataviado con una túnica de los Asesinos de color azul, con ropa de civil por debajo, el jugador le podrá cambiar la túnica a Arno durante todo el juego como quiera, incluyendo el aspecto y el color. También pueden cambiarse las armas para beneficiar y personalizar el personaje según un perfil u otro, por ejemplo; algunos ropajes subirán la salud del jugador, el sigilo, el uso de armas a distancia, el combate cuerpo a cuerpo, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario